La clase de Educación Física y su impacto en el Aprendizaje Escolar

Cuando se menciona la palabra “Educación” se nos viene a la mente el impacto que ha tenido en nuestras vidas. Normalmente la asociamos en el ámbito escolar de manera formal. Sin embargo, la Educación se da también en un concepto informal, en otros entornos y contextos determinados.

En sí, el concepto entraña una gran responsabilidad, sobre todo ante la sociedad, ya que diversos autores, especialistas y la misma ciencia la fundamentan de una manera muy sólida, en la que se considera como un instrumento para el avance y progreso de las personas y las sociedades.

Existe una disciplina didáctico-pedagógica dentro de los sistemas educativos en el mundo, en la que el concepto de Educación se le añade la palabra Física; entendida desde el punto de vista de la corporeidad.

En este sentido “La Educación Física” aunque no es considerada una ciencia, tiene un sustento científico muy importante, ya que, la educación desde el punto de vista de la corporeidad ha tenido en los últimos años avances muy significativos en el Aprendizaje Escolar.

Analicemos el porqué.
Lo primero es que entendemos el aprendizaje escolar como un proceso social de construcción de conocimientos por parte de profesores y alumnos, en el cual se trabajamos y desarrollamos habilidades y actitudes que dependen del área y/o asignatura específica. Actualmente se busca que sea integral para fortalecer todas las dimensiones de la persona y no únicamente el proceso cognitivo. 

En el caso de la Educación Física se fortalece el aprendizaje escolar desde 3 componentes:

La corporeidad, entendida como el conocimiento del cuerpo en su estructura física, emocional y actitudinal. La relación que existe entre este componente y el aprendizaje escolar se da desde la conciencia del alumno en su identidad, esquema y expresión corporal, al comunicarse y socializar con sus compañeros y compañeras, porque es un canal de comunicación para expresar ideas y sentimientos propios de sus avances y desafíos. La percepción de las personas al interactuar y convivir con los demás, así como la percepción del mundo que le rodea al identificar las características del entorno y de los objetos.

La motricidad entendida como el eje rector de la Educación Física que tiene su fundamento en el movimiento. La relación que existe entre este componente y el aprendizaje escolar se da inicialmente en los patrones básicos del movimiento, habilidades y destrezas motrices para posteriormente llegar a una autonomía motriz. El movimiento como tal traducido a la actividad física tiene grandes beneficios en el cuerpo; por ello el estudiante corre, salta, juega y se divierte liberando diferentes sustancias químicas en su cerebro (dopamina y serotonina) que lo hacen sentir bien, ayuda a su autoestima, fortalece su sistema inmunológico, previene la obesidad, entre otras cosas.

La creatividad motriz, entendida como un proceso de exploración del movimiento ante diferentes circunstancias. La relación que existe entre este componente y el aprendizaje escolar versa en que el alumno en actividades de la sesión de Educación Física, utiliza el proceso cognitivo de la creatividad en la construcción de respuestas anticipándose a las situaciones, así como discernir y tomar decisiones por medio del pensamiento estratégico. Por otra parte, se da también el pensamiento divergente al generar ideas mediante la exploración de diversas soluciones ante un mismo problema por medio de la motricidad y el juego.

La Educación Física utiliza como elemento central el movimiento, visto y definido desde una perspectiva que atiende contenidos de enseñanza en corporeidad, motricidad y creatividad en la acción motriz, de naturaleza vital, modificando poco a poco un paradigma meramente deportivo, rígido y tradicional, la que abordaremos en otra ocasión.

En conclusión, la clase de Educación Física y su impacto en el aprendizaje escolar, es una premisa demostrada y comprobada, ya que estos 3 componentes didáctico-pedagógicos brindan un desarrollo integral en las y los estudiantes, pero sobre todo desde uno de los aspectos más importantes en la educación, “el aprendizaje” como un derecho basado en los derechos humanos y de igualdad sustantiva.